Un plan contable es un plan estructurado que incluye todas las cuentas y principios contables de una empresa o institución.
El plan contable constituye el marco básico de la contabilidad, por así decirlo, y es la base de los estados financieros anuales y otros análisis empresariales.
Las empresas pueden personalizar el plan contable y adaptarlo a sus necesidades específicas y a su sector.
También se basa en la respectiva forma jurídica de la empresa y en la normativa fiscal aplicable.
Por eso en Alemania existen varios planes contables, como el SKR 03 o el SKR 04 para pequeñas y medianas empresas.
Un plan contable adecuado debe ser claro y fácil de utilizar para que la contabilidad funcione lo mejor posible.
DATEV eG es el tercer mayor proveedor de software empresarial de Alemania (clasificación IDC 2020) y uno de los mayores proveedores europeos de servicios informáticos. Fundada en 1966, la cooperativa de la profesión de asesoría fiscal alcanzó una facturación de 1.310 millones de euros en el ejercicio 2022.
La empresa ofrece programas informáticos para asesores fiscales, contables y auditores jurados y sus clientes.
Planes contables
Debido a la posición de liderazgo de la empresa en el mercado de los programas informáticos de contabilidad y como representante de los grupos profesionales mencionados, la cooperativa se ha impuesto la tarea de normalizar y desarrollar continuamente los planes contables.
Los planes contables Datev sirven a las empresas como plantillas y orientación para diseñar un plan contable. Contienen cuentas esenciales que pueden ser relevantes para empresas, organizaciones sociales o consultas médicas a efectos contables. A partir del plan contable pueden crearse planes contables específicos para cada empresa, eliminando las cuentas contables superfluas o añadiendo las que falten.
El plan contable estándar de DATEV es una ayuda fiable y probada para las empresas. Siempre están adaptados a los cambios legales.
Con el fin de proporcionar a las empresas planes contables que correspondan a las especificidades de su industria, se ofrecen soluciones adaptadas a los sectores económicos y áreas de actividad, además de los SCR generales.
Un plan contable ofrece muchas ventajas a las empresas.
Gracias a la presentación estructurada de todas las cuentas y grupos de cuentas, todas las operaciones de contabilidad financiera son borrar y estandarizado construido.
Esto agiliza y facilita la contabilidad.
Los planes contables normalizados también facilitan la comparabilidad de los datos financieros y la elaboración de balances y estados financieros anuales. También sirven de base para la preparación de declaraciones fiscales y garantizan que se registra toda la información pertinente.
Una empresa también puede utilizar un plan contable para establecer mecanismos de control interno, por ejemplo para evitar abusos y fraudes.
También facilita la colaboración con asesores fiscales y auditores, ya que tienen acceso a una base normalizada. En definitiva, son numerosas las ventajas para las empresas en términos de transparencia, comparabilidad, control y colaboración.
La elección del plan contable de una empresa es una decisión importante que debe tomarse con cuidado. Suele haber varios entre los que elegir, que difieren en cuanto a alcance y nivel de detalle.
Antes de decidirse por una, debe tener en cuenta la actividad empresarial y el tamaño de la empresa.
Algunas son más adecuadas para pequeñas empresas, mientras que otras se adaptan mejor a organizaciones más grandes. El sector en el que opera la empresa también desempeña un papel importante.
Por regla general, ya está predeterminado a través de la obligación con la empresa matriz y otras empresas o a través de la cooperación con el asesor fiscal.
No se preocupe: cada plan contable puede contener teóricamente entre 0001-9999 diez mil cuentas. Sin embargo, por regla general, en las empresas solo se utilizan unos pocos cientos de las cuentas contables pertinentes.
La subdivisión en subcuentas de estructura cada vez más fina, por ejemplo, permite diferenciar los distintos tipos de costes y analizarlos de forma más específica.
Sin embargo, un plan contable tan extenso suele ser innecesario para las pequeñas empresas y conlleva una elevada carga administrativa.
Por tanto, es lógico que estas empresas simplifiquen su plan contable creando menos cuentas.
Aquí también, como tantas veces en la vida, ¡menos es más!
La estructura se explica en el siguiente vídeo utilizando el ejemplo de los SKR 03 y 04. Estos son los más utilizados en Alemania.
Los dos planes contables estándar más comunes no difieren en absoluto en las denominaciones de las cuentas utilizadas.
Pero la clasificación de las cuentas difiere.
El SKR 03 sigue el principio de clasificación por procesos, el SKR 04 el principio de clasificación por estados financieros.
Ambos son importantes planes contables utilizados tanto por los contables como por las empresas.
El SKR 03 es adecuado para empresas que trabajan según la contabilidad por partida doble, mientras que el SKR 04 es adecuado para empresas con contabilidad de excedentes de ingresos (EÜR), por ejemplo, para autónomos.
Ambos permiten llevar una contabilidad estructurada y sistemática. Existen varias opciones para descargarlos.
El lugar más fiable para encontrar lo que busca es el sitio web de Datev, donde encontrará los productos más comunes SKR para descargar.
El tema de los planes contables no es tan fácil de responder en términos generales. Ambos planes de cuentas son igualmente buenos.
Por regla general, el curso ya está fijado por el contable o asesor fiscal y la elección suele venir determinada por los requisitos específicos del sector.
Y es cierto: los números de cuenta no son decisivos.
En la práctica, los contables se limitan a arrojarse unos a otros el número de cuenta y los extraños se ven completamente desbordados.
La designación de la cuenta es mucho más importante, ya que las cuentas contables suelen tener números diferentes en todos los planes, pero casi siempre los mismos nombres.
Así que el lema es: aprende vocabulario, la práctica hace al maestro.
Cambiar a otro marco, ¡no hay problema!